Se ha puesto fecha límite para ejercer el derecho de las reclamaciones judiciales: la primera semana de mayo. Después no se podrá recuperar el dinero invertido.
La salida a bolsa.
En el año 2011, la flamante Bankia sale a bolsa, a bombo y platillo. Todos recordamos aquellas imágenes. Muchos de los clientes de Bankia fueron convencidos para suscribir acciones, gastaron su dinero, en muchos casos ahorros, porque les vendieron un producto muy “bueno” que les iba a dar un importante rendimiento. A otros clientes a los que antes la entidad les había vendido participaciones preferentes, se las canjeó por acciones.
El desplome.
En tiempo record, en menos de un año, Bankia se desploma y aparece un agujero de varios millones de euros, es decir, que lo que aparentemente era una buena inversión se convierte en una ruinosa inversión.
Algunos de los ciudadanos que suscribieron estas acciones procedieron rápidamente a su venta, al menos para recuperar una parte de la inversión. Los que las conservaron vieron que, con el paso de los años, su valor es insignificante.
Bankia no devuelve el dinero.
Las reclamaciones frente a la entidad no sirvieron ni sirven para nada, nadie recuperó su dinero.
Ha tenido que ser casi cuatro años después cuando se comience a hacer justicia, los ciudadanos gracias a las sentencias dictadas por los jueces están recuperando su dinero, tanto los que vendieron como los que siguen siendo accionistas.
La Justicia al rescate de los ciudadanos.
A finales de 2014 algunos Juzgados y Tribunales comienzan a dictar sentencias anulando las compras de acciones y obligando a Bankia a devolver íntegramente el dinero con sus costas e intereses. A día de hoy, esta tendencia no ofrece duda, la mayoría de Juzgados se suman a esta corriente, llueven las demandas contra Bankia, ésta se defiende, pero termina siendo condenada.
De tal forma que a los que todavía son accionistas de Bankia se les devuelve el dinero invertido, con sus intereses correspondientes, y a los que ya no son porque vendieron, se obliga a Bankia a indemnizarles por la diferencia.
Ante esta situación, en Caruncho y Tomé hemos creado un departamento específico dedicado a la atención de nuestros clientes accionistas de Bankia y canalizar las demandas judiciales para recuperar la totalidad de la inversión. Estas reclamaciones tienen una fecha límite: la primera semana del mes de mayo de 2015. Una vez transcurrida esta fecha el ciudadano perderá el derecho a toda posible reclamación.
Consúltenos sin compromiso.